Después de unos meses de haber hecho la preboda de Patri y Diego, ¡al fin llegó su boda! y os puedo garantizar que el haber hecho la preboda hizo mucho. Cuando llegué no fue un “ha llegado la fotografa” y ya, fue alegría, emoción y abrazos. Y obviamente ayudó mucho más en el ambiente a que tanto Patri como Diego estuvieron tranquilos.
¡Y QUE BODA!
sin más dilación, os dejo con el reportaje de fotos de su boda: